Actualizado (Post original de 28 de diciembre de 2020) . Hace unos días volví Bresca, la taberna italiana. en este caso en Fuencarral y probé otros platos que no conocía.
Al día siguiente de encenderse las luces de Navidad en Madrid fui a cenar con unas amigas cerca de Sol para dar un paseo y ver como habían quedado. Reservamos en Bresca, la taberna italiana. Tiene tres sucursales en Madrid, pero nos apetecía ir a esta zona.
Decoración
Bresca significa, en dialecto de Bolonia, “tener el puntito” después de haber tomado unas copas y, este nombre, es toda una declaración de intenciones. El objetivo de los dueños es que cuando vayamos a comer disfrutemos del momento con esa alegría y desinhibición que da ese puntito.
El restaurante ocupa un espacio de dos plantas con grandes cristaleras a la calle. En la decoración predomina la madera y, sobre todo, llama la atención una de las paredes de la planta baja que está cubierta de cajones como los de las tiendas antiguas. las mesas son de madera clara y las sillas de colores. En la primer planta se ha colocado un sofá corrido en uno de los lados y en el otro la pared está decorada con un trampantojo.
Cocina
La cocina de Bresca es italiana, sobre todo de Bolonia. La cocina de esta ciudad de tradición universitaria es informal, rica, fácil de compartir y con precio moderado. La carta es muy variada y sus especialidades son los tigelle -bocadillitos-, las tablas de embutidos y quesos para compartir, las pinsas -pizzas ovaladas- y la pasta de Bolonia.
Pedimos todo para compartir empezando por una cesta de tigelle modenesi, una de las estrellas del restaurante. Los tigelle modenesi son una especie de focaccia pequeña elabora con un pan típico de los Apeninos modenenses cuyo nombre original era crescentine. Es debido a que se elabora con una masa “que crece” porque tiene levadura. Más tarde adoptaron el nombre de los discos de barro (tigelle) con los que se cocinan. Es un plato de street food italiana. Se pueden rellenar de diferentes cosas y en Bresca lo hacen de ocho maneras diferentes y se pueden pedir por unidades o en una cesta que tiene seis. Nosotros pedimos tres iguales de mortadela con trufa, stracchino y rúcula.
Después tomamos una pizza carbonara de calabaza con crema de calabaza piamontesa, mozzarella fiordilatte, pancetta romana ahumada, pecorina y scamorza, muy rica y, a continuación, probamos la lasaña de trufa y boletus, también deliciosa.
No nos cabía el postre; de hecho no pudimos terminar todo, pero queríamos probar algo y pedimos el helado tartufo de chocolate y vainilla y también nos gustó. En mi última visita fuimos a tomar el aperitivo pensando en tomar la cesta de tigelle modenesi, pero en el restaurante de Fuencarral no había una pena, así que pedimos una tabla de mortadela con trufa que acompañan con tigella y saquitos secretos, un plato de pasta bastante rico.
Disponen de carta sin gluten y el servicio es muy amable
C/ Virgen de los Peligros, 7 Teléfono 91 412 66 05 Mapa de situación.
