Hay mucha gente que ya está plenamente incorporada a la vida cotidiana y otra que todavía prefiere hacer planes en casa. Trabajando o teletrabajando, no resulta fácil ir a la compra, cocinar, organizar la mesa… y menos preparar una comida imprevista. Hoy os voy a recomendar qué podemos tener en nuestro congelador que nos permita organizar una buena comida o cena cuando de pronto nos suena el teléfono y escuchamos “Estoy por tu barrio, como contigo”. También puede resultar útil para el congelador del campo o la playa y poder comer bien sin tener que meternos demasiado tiempo en la cocina.
Croquetas
No conozco a nadie a quién no le gusten las croquetas. No es un plato difícil de preparar y congelan bien, pero lleva su tiempo hacerlas. Hace unos días encontré una solución perfecta. Recibí en casa una selección de croquetas gourmet de CroquetasRicas. Las croquetas, que puedes comprar en su tienda on line, las traen a casa congeladas a -18ºC, así no se rompe la cadena de frío y puedes tenerlas hasta hasta 1 año en el congelador. Las tienen de seis sabores diferentes y están todas deliciosas. Puedes pedirlas de jamón ibérico, boletus, queso azul, bacalao, pollo con almendras, las favoritas de mi hijo, y, por último, de puerro confitado, dátiles y zanahoria, muy ricas y originales.
Hace unos días me llamó una amiga que estaba cerca de casa y vino a tomar un vino, le freí una de cada clase y le encantaron. Las acompañé con un tinto joven de Bodegas Carrascalejo 100% Monastrell, riquísimo.
Mejillones
Desde que tengo anisakis no puedo tomar pescado fuera de casa y aún así solo puedo comerlo cocinado, nada de platos japoneses, ni latitas de berberechos y mejillones que me encantan. Hace un par de meses compré unos mejillones congelados con cáscara y los hice con vino blanco y estaban muy ricos, así que ahora siempre tengo en el congelador.
Receta
1 kg de mejillones
Medio limón de Murcia
Un vaso de vino blanco
Pimienta negra
Una hoja de Laurel
Se pueden descongelar poniendo un poco de agua en la cacerola. Yo añado medio limón, exprimo un poco y el resto lo corto en trocitos y los pongo también en la cazuela. Añado un poco de pimienta negra recién molida y una hoja de laurel. Tapo la cacerola y cuando noto que empieza el agua a hervir, la abro y añado un buen chorro de vino blanco. En cuanto abren los mejillones los aparto del fuego. Los compro también sin cáscara y están ricos, pero para ponerlos en guisos con otros pescados.
Fritá o fritada murciana
Cuando voy a Mula, me encanta ir el sábado al mercado a comprar verduras y siempre llevo a casa pimientos verdes italianos y tomates maduros para pedir a alguna caritativa buena cocinera me prepare un fritá que me llevo a Madrid en un tupper. Yo también la sé hacer y a veces al preparo, pero me hace más ilusión abrir el congelador y ver los cacharros que he traído de Murcia.
Receta
1 kilo de tomates maduros
2 pimientos verdes italianos cortados a tiras
Aceite de oliva virgen extra
Azúcar al gusto, como cuando se prepara tomate frito
Sal
Escaldamos los tomates para pelárlos mientras vamos empezando a freír los pimientos. Los tomates, una vez pelados, se cortan y se añaden a los pimientos y se van friendo juntos. Cuando ya estén bastante hechos y no quede jugo del tomate, se les pone la sal y, a continuación, un par de cucharadas de azúcar. Se prueba para ver si hay que rectificar. Una vez que coge textura de un buen tomate frito se aparta y se puede tomar así o acompañada de huevos fritos. Es uno de mis platos favoritos. Congela y descongela muy bien.
Mi hijo lo acompañó también con una morcilla y me mandó esta foto
Si servimos cualquiera de estos platos con unos buenos quesos o embutidos o incluso con una tortilla de patata ¿Qué más se nos puede pedir? Si queréis ver como prepara la tortilla Pepa Muñoz, una de nuestras mejores chefs, pinchad aquí.