Hace unos días, antes de las vacaciones de Semana Santa, organicé un almuerzo de trabajo en La Primera. Quería conocer un sitio nuevo y a la vez tener garantía de éxito, así que aposté por el restaurante nuevo de Paco Quirós. Me encantan Cañadío, La Maruca y La Bien Aparecida. La Primera también me gusto mucho.
Situado en el edificio Grassy, uno de los más emblemáticos de Madrid, al comienzo de la Gran Vía, se ha decorado de manera sobria y elegante. Predominan los tonos oscuros, grises y azules, pero como el restaurantes está rodeado de ventanales entra luz natural y resulta muy luminoso. El espacio está dividido en una zona de barra y tres comedores, el del fondo: “La Rotonda”, me encantó. Las mesas, con diferentes tableros y sin mantel, están casi todas pegadas a los ventanales y tienen vistas a la Gran Vía unas y a la calle de Alcalá otras.
El propietario quiere que al entrar en La Primera nos sintamos como en Cantabria. Para ello ha apostado por una cocina de fuertes raíces montañesas. Los platos están elaborados con recetas tradicionales a las que se les da un toques de modernidad en la presentación. Tomamos como entrantes para compartir alcachofas a la plancha deliciosas, pura crema y rabas, muy buenas. De segundo yo probé la hamburguesa, la carne es rica, y mi acompañante “parada en Landa” unos huevos escalfados con puré de morcilla y patatas en tempura que nos encantaron. De postre pedimos “tarta de queso Cañadio”, de las más ricas que he tomado nunca. La típica tarta de los restaurantes de Quirós que para muchos es la mejor de Madrid.
Nos atendió Pedro, un camarero jovencito, encantador que acabó invitándonos a la tarta
C/ Gran Vía, 1 Teléfono 91 052 06 20 Mapa de situación
